 |
Transcendence debe ser una película
de culto. |
Bueno amigos y amigas. Primero que todo, la verdad no es lo mío esto de tratar muy a fondo el CINE en mis blogs, creo haberlo hecho hace siete años, pero la verdad... muy dolido con el final de Transcendence, la película realizada por el doctor Wally Pfister, discípulo del cineasta Christopher Nolan. Se supone que Transcendence es el regreso a las pantallas grandes, del "hombre de las mil caras" Johnny Depp, conocido por sus personajes de Edward Scissorhands, Jack Sparrow, Willy Wonka, Sweeney Todd y el Sombrerero Loco. Él encarna al doctor Will Caster, un personaje de apariencia normal, pero que muere debido a los efectos de la "transcendencia" o transhumanidad, qué se yo... Lo más extraño del caso es que él y su esposa Evelyn mueren en su laboratorio, y con ellos mueren toda clase de instrumentos tecnológicos tales como smartphones, celulares, tablets, iPads, iPhones, laptops, e incluso Google y la Internet dando paso al resurgimiento de la naturaleza... Algo así como un "fin del mundo" donde los humanos se enloquecen debido a la desaparición de la tecnología.
Considero que Transcendence debe ser una película de culto. No es la típica película del monopolio de Hollywood donde los protagonistas, como dicen en los cuentos infantiles, "fueron felices comiendo perdices". ¡No, señores! Wally Pfister se salió del cliché hollywoodense para centrarse en una antitrama que rompe con los principios dramatúrgicos de Aristóteles, por eso digo que "Transcendence" debe pasar a formar parte del círculo de películas de culto, tales como Pulp Fiction, Kill Bill, Memento, Trainspotting, Jackie Brown, Easy Rider, todas las de Stanley Kubrick, qué sé yo... Sin lugar a dudas... una película diferente.
